Hop Inn

Hong Kong es una dinámica metrópolis al sureste de China que puede presumir de una hermosa silueta formada en contraposición por la belleza natural de los parques naturales cercanos y las montañas que están a un saltito de distancia de la ciudad. Estas características la convierten en un destino ideal de escapada para los amantes de la naturaleza y los más aventureros. Además, a los amantes de la comida se les hará la boca agua con las sabrosas delicias locales que ofrece la ciudad. Y si lo tuyo es volver a casa, o al hostel, cargado de bolsas, prepárate porque Hong Kong tiene tiendas para aburrir.

Opta por un hostel en Hong Kong ubicado en los distritos más céntricos si lo que buscas es estar a pocos pasos de los famosos mercadillos y lugares de fiesta, o, si necesitas espacio para respirar hondo, hospédate en uno situado en una isla. Los hostels en Hong Kong incluyen un creativo alojamiento con muebles de estilo vintage o uno de tipo cápsula lleno de tecnología y donde casi todo es automático. La mayor parte de los hostels en Hong Kong ofrecen wifi gratuito, y algunos tienen terrazas desde donde poder hacer fotos de las espectaculares vistas de la ciudad. ¡Tus seguidores de Instagram te van a tener mucha envidia!

En el centro de Hong Kong te toparás con Lan Kwai Fong, el lugar de juerga por excelencia, con más de 100 bares entre los que elegir en función de tu estilo. Para los hipsters, Hong Kong ofrece el área Sheung Wan, llena de arte callejero, muchas cafeterías y puestos de comida de moda. Si por el contrario prefieres una experiencia más tradicional, lo tuyo es ir a Jordan, en el distrito de Kowloon, para explorar los animados callejones y los puestos de comida callejera, mientras que Mong Kok es el sitio ideal para practicar tu arte del regateo en uno de los múltiples mercados.

Empápate de las impresionantes vistas de la ciudad desde Victoria Peak, el punto más alto de la isla de Hong Kong. Para subir de manera sencilla y obtener unas vistas espectaculares, mejor que tomes el clásico tranvía. Al atardecer, a eso de las 20.00 horas, puedes ir al muelle Victoria, para divisar el magnífico festival de luces sobre la ciudad. La visita a las famosas escaleras mecánicas de niveles centrales y medios es obligatoria, y es que la ciudad presume de tener las escaleras cubiertas en espacios públicos más largas. Además, puedes huir del ajetreo y encontrar tu paz interior en el templo Man Mo o en el monasterio de los Diez mil Budas, a las afueras de la ciudad.

Recorrer Hong Kong es sencillo, ya que cuenta con uno de los sistemas de transporte público más seguros y eficientes del mundo. El Mass Transit Railway supone la manera más cómoda de moverse por la ciudad, ya que conecta la mayoría de las islas entre sí, mientras que el resto se benefician de un sistema de ferris que pasan de manera frecuente. Desde el Aeropuerto Internacional de Hong Kong tardarás 25 minutos en llegar a la estación de ferrocarril de Hong Kong. Si tu presupuesto es ajustado, también puedes ahorrar algo de dinero al tomar una de las múltiples líneas de autobuses públicos para llegar a tu hostel, aunque tardarás más tiempo.